Cuando un proveedor te ofrece un descuento por pronto pago, es tentador aceptarlo. Pero si necesitas endeudarte para hacerlo, más vale sacar la calculadora antes de tomar la decisión. El confirming y otras fórmulas de financiación a corto pueden ayudarte a ahorrar. O no. Todo depende de cuánto cuesta el dinero que vas a pedir prestado.
Cada vez más proveedores ofrecen descuentos por pronto pago a cambio de abonar sus facturas al contado. Es un gesto comercial que puede resultar tentador. Pero, si para hacerlo necesitas recurrir a financiación bancaria, conviene parar y calcular: ¿te sale a cuenta?
La lógica financiera es clara: sólo vale la pena endeudarse si el ahorro que consigues es mayor que el coste de financiar ese adelanto. No es una regla abstracta: puedes calcularlo en menos de cinco minutos con los datos adecuados. Veámoslo con un ejemplo.
Imagina que tu empresa ha acordado con un proveedor una compra de 15.000 euros con vencimiento en 45 días. El proveedor te ofrece un descuento del 3 % si pagas al contado, lo que deja el pago en 14.550 euros. No tienes liquidez inmediata, pero tu banco te ofrece una opción de financiación a corto plazo. Estas son las condiciones:
- Comisión por transferencia financiada: 0,15 %
- Interés anual aplicado: 5,2 %
- Plazo de financiación: 45 días
- Sin comisión de apertura o renovación (ya tienes una línea operativa activa)
Veamos el coste total de financiar esos 14.550 euros durante 45 días:
Concepto | Cálculo | Importe (€) |
---|---|---|
Comisión por operación | 14.550 x 0,0015 | 21,83 |
Intereses por 45 días | (14.550 x 0,052 / 360) x 45 | 94,65 |
Total coste financiero | 116,48 | |
Ahorro por descuento aplicado | (15.000 – 14.550) | 450,00 |
Beneficio neto de la operación | (450 – 116,48) | 333,52 |
Resultado: Financiar el pago para aprovechar el descuento es rentable, ya que el ahorro supera claramente el coste financiero.
¿Qué debes tener en cuenta antes de aceptar una operación así?
- No todos los descuentos justifican una financiación
- Si el descuento es pequeño (1 % o menos), puede que el coste del dinero anule la ventaja.
- Negocia los costes financieros
- Las condiciones de intereses y comisiones pueden variar entre bancos. En muchas ocasiones, puedes conseguir rebajas por volumen o historial.
- Ten en cuenta todos los costes anuales
- Aunque en este ejemplo no se incluye comisión de apertura, si la hubiera, habría que prorratearla entre las operaciones previstas para valorar el coste real por operación.
- Confirma tu capacidad de pago al vencimiento
- Si financias una operación a 45 días, asegúrate de que en esa fecha tu tesorería te permitirá hacer frente al cargo. Los retrasos pueden implicar comisiones adicionales o incluso recargos por impago.
Confirming: la herramienta que puede ayudarte
Si tu banco te ofrece confirming pronto pago, estás ante una modalidad eficiente de financiación a corto plazo. Te permite adelantar pagos a proveedores y negociar descuentos, sin consumir línea de crédito tradicional ni afectar tu posición en la CIRBE. Además:
- Simplifica tu gestión administrativa (el banco paga por ti).
- Refuerza tu imagen ante los proveedores.
- Puede ayudarte a conseguir mejores precios por volumen.
- No implica endeudamiento bancario directo.
En resumen, sí, puede merecer la pena endeudarse para pagar antes, pero solo cuando el coste de financiación está por debajo del ahorro logrado. Si no lo calculas, te arriesgas a pagar más por querer ahorrar. Evalúa cada operación con números en la mano, negocia con tu banco y mantén siempre el control de tu tesorería.
Porque ahorrar por pagar antes solo es buena idea cuando no te sale caro endeudarte.